La Paz Ciudad Capital de Baja California Sur
Por: Travel by México
La Paz Ciudad Capital de Baja California Sur
Por: Travel by México
La Paz se localiza en la parte meridional de la península que, debido a su geografía, pareciera situarla en el confín del mundo. La ciudad, trazada de oriente a poniente sobre la bahía que lleva su nombre, es bañada por las cálidas aguas del Golfo de California, o Mar de Cortés. Antaño figuró como lugar codiciado por bandoleros y piratas legendarios del siglo XVI, como Thomas Cromwell o Francis Drake, gracias a la abundancia de perlas encontradas en los alrededores.
El orígen de La Paz no estuvo alejado del infortunio, pues en opinión de algunos historiadores fue fundada al menos en 5 ocasiones: la lejanía de aquel punto con el resto de la Nueva España dificultaba el abastecimiento de provisiones, lo que impedía un desarrollo colonial sostenido, a diferencia del resto de los virreinatos fundados a lo largo de México por los españoles. Hernán Cortés fundaría aquí una colonia que recibió el nombre de Bahía de Santa Cruz en 1535, pero a la brevedad el nuevo poblado sucumbió. El navegante Sebastián Vizcaíno desembarcaría en 1596 y daría el nombre que actualmente conocemos, La Paz, debido a las manifestaciones pacíficas de los indígenas guaycuras que habitaban la región. Sin embargo la firme conquista de la baja California y su posterior colonización tendría lugar hasta 1697 con la llegada del padre jesuita Juan María de Salvatierra, al paso de su labor evangelizadora.
Actualmente La Paz, siendo una población costera, ofrece al turismo una gran cantidad de atractivos relacionados con el mar, lo que le ha valido su fama a nivel internacional gracias a la pesca deportiva, el buceo, la práctica del snorkel, entre tantas otras actividades practicadas en sus hermosas playas. Las más importantes son El Coromuel, El Caimancito, Pichilingue y El Tecolote, las cuales se caracterizan por ofrecer servicios de restaurante y palapas a los turistas que disfrutan del clima y tranquilidad de dichas playas. ¿Se le antoja probar una deliciosa langosta? O tal vez una almeja chocolata, la machaca de mantarraya, una carne de puerco en salsa de tamarindo o un filete imperial, platillo que consta de una rueda de camarones prensados rodeados de tocino, preparados a la plancha. Esos son sólo algunas de las recetas que destacan en la cocina paceña, rica en ingredientes provenientes del mar y notable por el sazón de sus guizos.
Sin embargo en La Paz también existen otras playas que, a diferencia de las anteriores, preservan una condición solitaria que confiere a los bañistas la sensación de permanecer totalmente ajenos al mundo cotidiano, como son Balandra y El Coyote, absorbiendo los sentidos del visitante en un marco de singular belleza. Pero no sólo la naturaleza se extiende majestuosa con esa gran cantidad de atractivos sin igual: también La Paz atesora una notable riqueza histórica que nos transporta a un pasado muy especial, mismo que rodea la solidez del presente con una sensación de armonía que, haciendo honor al nombre de la ciudad, se percibe en todo el ambiente. Recorrer el malecón Alvaro Obregón, observar las viejas casonas que datan del siglo XIX y adentrarse hacia el centro de la ciudad brinda una interesante experiencia a los paseantes. Y de gran valor cultural resulta la visita al Museo de Antropología e Historia del Estado, mismo que cuenta con una colección de pinturas rupestres, así como con diversas salas de exhibición dedicadas al conocimiento de los diversos pueblos californianos que habitaron la región desde tiempos prehistóricos.
Frente al Jardín Velazco la catedral de Nuestra Señora de La Paz, templo que a comparación de muchos otros encontrados en territorio mexicano, es de reciente construcción, pues data del siglo XIX. También el Parque Revolución, o aquel que rodea el Bello Teatro de la Ciudad, mostrando orgulloso La Rotonda de los Hombres Ilustres y los cuatro molinos que dan su nombre a aquella zona, recordando a La Paz de antaño.
Y si Usted disfruta el salir de compras y curosear de aparador en aparador, le sugerimos estar preparado con sus tarjetas de crédito ya que La Paz, por ser un puerto libre, se distingue como uno de los puntos comerciales más atractivos que puedan existir, ofreciendo una gama enorme de artículos nacionales o extranjeros de toda clase.
En las cercanías de La Paz abundan muchos atractivos más, los cuales destacan ya sea por lo extraordinario de su fauna marina, o bien por la paradisiaca soledad de su entorno, elementos imprescindibles para quienes gozan del ecoturismo y el contacto con la magia de la naturaleza. Las islas del Espíritu Santo y Cerralvo son ejemplo de ello, aunque también abundan en las proximidades comunidades que ofrecen sus servicios al turista en playas como Las Cruces, Buenavista y Los Barriles, lugares idóneos para tenderse al sol, disfrutar de las olas del mar y saborear una refrescante damiana, bebida típica elaborada a partir de la planta silvestre del mismo nombre, cuyas propiedades saludables son tan celebradas como populares. En cambio, las poblaciones de El Triunfo, San Bartolo y Todos los Santos, se abren al turismo mediante la brillante elaboración de artesanías, dulces típicos de la región o simplemente gracias a la gran vida cultural que les caracteriza.
Es La Paz, ciudad cuya fiesta principal reverbera en el corazón de sus habitantes cada 3 de mayo, celebrando la fundación de la que hoy en día se erige como la hermosa capital del maravilloso estado de Baja California Sur. Ciudad anfitriona de miles de visitantes atraídos por la alegría del famoso Carnaval, o gracias a la gran cantidad de competencias deportivas que tienen lugar en el que antaño fuera suelo de indios guaycuras. Una ciudad de especial belleza, siempre abierta al turismo del mundo.