Morelia será sede de la 5 Feria Internacional de Pueblos Mágicos

Morelia alojará esta importante feria del 11 al 14 de octubre de 2018.

Morelia, conocida por sus canteras rosas, su majestuoso acueducto y magnífica catedral, será la sede de la 5 Feria Internacional de Pueblos Mágicos.

Gracias al patrimonio arquitectónico conservado desde la época colonial, el Centro Histórico de Morelia fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1991, convirtiendo a esta ciudad en el destino sin playa más visitado de todo México.

En el marco del 43 Tianguis Turístico, que se realiza en Mazatlán, Sinaloa, el subsecretario de Innovación y Desarrollo Turístico de la Secretaría de Turismo (Sectur), Rubén Gerardo Corona González, dio a conocer la elección de Morelia como sede de esta feria.

La pasada edición tuvo lugar en Nuevo León, donde se rompió récord de asistencia, pues se recibieron cerca de 115 mil asistentes, con una ocupación hotelera de 85 por ciento.

“Ahora damos la oportunidad al estado de Michoacán, donde seguramente superaremos estas cifras. Felicidades por haber tomado la responsabilidad de llevar esta Feria de Pueblos Mágicos, que es el marco perfecto para mostrar las maravillas que tiene este estado lleno de tradición, de magia y de folklor en México”, expresó.

La arquitectura de Morelia: Patrimonio del Mundo

Morelia es la ciudad con más edificios catalogados como monumentos arquitectónicos: posee 1,113 y de ellos 260 fueron señalados como relevantes.

En su declaración, la UNESCO consideró que algunas de las perspectivas urbanas del Centro Histórico de Morelia constituyen “un modelo único en América”.

La arquitectura monumental de la ciudad se caracteriza por su estilo calificado como “barroco moreliano”, por la originalidad de sus expresiones locales que se plasman en el Acueducto, la Catedral Metropolitana, en el conjunto de la iglesia de la Compañía y el ex Colegio Jesuita así como en las fachadas y las arcadas de los corredores y patios de las casas Vallisoletanas.

La diversidad de estilos va desde tipologías arquitectónicas de finales del siglo XVI, donde el aspecto de fortaleza medieval convive con elementos renacentistas, barrocos y el neoclásico hasta llegar al eclecticismo y afrancesamiento del periodo de Porfirio Díaz.