Templo de Santo Domingo de Guzmán
Templo de Santo Domingo de Guzmán
A partir de 1555 se inicia la construcción de este conjunto arquitectónico monumental realizado por la Orden de los Dominicos; y se concluye hasta la segunda mitad del siglo XVIII, en el año de 1724, cuando se realiza la última modificación al dar comienzo la construcción de la Capilla del Rosario.
El Templo de Santo Domingo de Guzmán fue el centro de evangelización más importante de Oaxaca; testigo histórico de importantes sucesos que marcaron el futuro del Estado.
En su interior resguarda importantes obras de arte que se conservan como vestigio cultural de tres siglos del Virreinato en Oaxaca.
Con su fachada y su espléndida ornamentación interior como la Capilla del Rosario, tapizada en oro; o su techo con medallones, es sin duda una de las más bellas muestras del barroco en México.
En la bóveda de la iglesia se puede observar en alto relieve estucado el "Árbol de Jessé" o Árbol de la Vida, manifestación churriguresca y mestiza de un encanto inimaginable. Figuras de vid y sus racimos de uvas se convierten en figuras humanas; se fusionan el Árbol de la Vida de los cultos prehispánicos con el Árbol Genealógico de la orden dominica, dando como resultado un exquisito panorama artístico sin precedentes.
Entre 1956 y 1959 se realizaron labores de restauración en el retablo principal del templo y el de la capilla del Rosario, que fueron destruidos en el siglo XIX. Posteriormente, los terrenos del claustro central y el patio de servicios fueron cedidos a la Universidad Autónoma de Oaxaca.
Para 1972 se instauró dentro del conjunto el Museo Regional de Oaxaca o Museo de las Culturas de Oaxaca, a cargo del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
En 1993, por decreto federal se entregó por completo el inmueble que fue destinado para fines culturales. El Templo de Santo Domingo de Guzmán se encuentra en el corazón de la Ciudad de Oaxaca y hace parte del conjunto declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO.