En el MAHG de León, Naoya Hatakeyama muestra paisajes en reconstrucción tras el gran tsunami de 2011
Realizada en vinculación con la Fundación Japón y el Consulado General del Japón en León, la exposición temporal: “Rikuzentakata 2011-2016. Fotografía de Naoya Hatakeyama” recuerda a una de las poblaciones afectadas por el gran Tsunami que sacudió la costa noreste de Japón el 11 de marzo de 2011 y causó la muerte de 15 mil 893 personas y la desaparición de más de 8 mil otras.
Tomadas entre 2011 y 2016, las fotografías que integran esta exposición muestran cómo desde la destrucción de su ciudad natal, Rikuzentakata, tras el *terremoto de 2011 se puede amansar el caos, permitiendo al espectador encontrar una gran belleza en el paisaje en reconstrucción.
*Terremoto de magnitud 9,0 MW1 6 que creó olas de maremoto de hasta 40,5 metros, el Terremoto de la costa del Pacífico en la región de Tōhoku de 2011 ó Gran terremoto de Japón oriental ocurrió a las 14:46:23 hora local (05:46:23 UTC) del viernes 11 de marzo de 2011.
Acerca de la exposición
Esta catástrofe natural barrió la costa noreste de Japón arrasando multitud de localidades costeras, entre ellas Rikuzentakata, pequeña población de 24 mil habitantes situada a 500 kilómetros de Tokio, conocida por su playa de arena blanca y el enorme pinar que protegía el lugar del viento y las tormentas.
El tsunami redujo a escombros esta próspera población y arrebató la vida de 1569 personas.
Tras el desastre solo un árbol sobrevivió, un árbol que se convirtió en un símbolo de esperanza para los supervivientes hasta que a principios de 2012, el solitario pino empezó a morir debido al agua salada.
En su tronco se podía ver la marca de la altura que alcanzó el mar: 18 metros.
Desafortunadamente, no se podrá plantar nada en las tierra de Rikuzentakata hasta dentro de unos ocho o nueve años, cuando el efecto del agua salada en la tierra se pase.
Inauguración
Mañana miércoles 8 de febrero de 2017 a las 19 horas en el Museo de Arte e Historia Guanajuato se realizará la inauguración de la exposición de Naoya Hatakeyama.
Agudo observador de paisajes en transición, presenciando escenas de transformación con calma precisión, Naoya Hatakeyama es uno de los fotógrafos más destacados de Japón.
Conocido por sus austeras y bellas imágenes a gran escala, en esta exposición Hatakeyama capturó las extraordinarias fuerzas que somos capaces de desplegar para dar forma a la naturaleza.
