Desde sus orígenes, la Ciudad de Poza Rica ha sido sinónimo de transformación: la otrora selva vírgen se vería invadida por los deseos de gloria de aquellos que buscaron riqueza en la entonces nueva industria petrolera. Sin duda la obtuvieron.

La historia de Poza Rica de Hidalgo, al norte del Estado de Veracruz, comienza apenas en 1872 cuando indígenas totonacas se establecen a orillas del Río El Mollejón. Se trata de un lugar cálido, con lluvias abundantes en verano y principios de otoño, situado a 50 metros sobre el nivel del mar. Hacia la década de los años 30, hombres y mujeres alimentados por sueños y ambiciones se arrojan a la búsqueda del "oro negro", luchando contra condiciones adversas debido a la fuerza natural de las selvas. El paisaje combinaría el verde de su vegetación con los quemadores de gas, vigilantes nocturnos del sueño de aquellos obreros petroleros que dieron sentido a la ciudad.

Pero la transformación nunca cesa. Poza Rica se perfila actualmente como un centro industrial y comercial de gran envergadura, teniendo como base una infraestructura tan sólida como creciente. Esto le ha convertido en preciado eslabón del desarrollo económico veracruzano, abriéndose además como una gran opción de esparcimiento gracias a la gran cantidad de hoteles, restaurantes y prestadores de servicios que conforman su industria turística.

¿A qué se debe que el turismo se haya desarrollado tanto en esa jóven ciudad? Poza Rica tiene una ubicación geográfica privilegiada, ya que en las cercanías se encuentran las playas de Tuxpan, Tamiahua Tecolutla, Cazones y Costa Esmeralda, así como preciadas zonas arqueológicas en las que palpita un pasado glorioso: El Tajín, Filobobos y Tlapacoyan. De igual manera ha venido cobrando fuerza el ecoturismo, practicado sobre todo en los exuberantes parajes de la sierra papanteca, palpitante y llena de vida. Inolvidable resulta la experiencia de recorrer tan magníficos paisajes y acampar al abrigo de una cálida noche.

Esta es una tierra fecunda que ha inspirado la paleta de aquellos que, participando del encanto del lugar, legaron a la posteridad murales en los que se ha grabado el avance de Poza Rica en todos los ámbitos. Se muestran coloridos y silentes 17 murales en plazas típicas y parques, trabajados magistralmente por la mano de Teodoro Cano, Pablo O’Higgins Javier Mayagoitia, entre otros artistas de valía. Y mientras el visitante recorre calles y rincones, una parvada de aves zurcando el cielo esbosa un manto que contrasta con la blancura de las nubes, moviéndose armónicamente al ritmo de cantos y cálidas brisas.

Poza Rica hace honor al sobre nombre que muchos conocen: "La tierra de las oportunidades", abriéndose generosa a quienes deciden probar suerte en su tierra, tal como hicieron mas de un siglo atrás aquellos aventureros que dieron vida a este paraje  veracruzano. Al séptimo día de diciembre las velas se encienden para alumbrar al pueblo entero. Se trata de una celebración religiosa de mucho arraigo: el Día del Niño Perdido, día en el que se estrechan pasado y presente, reafirmando lazos entre generaciones de pozarricenses entregados a la devoción de la fe a su iglesia y su ciudad.

¡Y qué decir de la gastronomía de Poza Rica! Baste mencionar que estando el Golfo de México justo frente al estado de Veracruz, la cantidad de platillos y recetas que aquí se han generado rebasa la imaginación de cualquier experto. Huachinangos, robalos, camarones, jaibas y pulpos preparados sin igual, deleitando paladares al sazón de ingredientes tan especiales como típicos de la región. Por ejemplo, la famosa salsa mexicana hecha en molcajete con ingredientes frescos nació en esta tierra de huapango y son jarocho. Recomendamos ampliamente que visite fondas, restaurantes y mercados para que pruebe los platos típicos del lugar y se refresque con el delicioso sabor de aguas de fruta.

Por si fuera poco, el espíritu de los habitantes de Poza Rica se destapa en gran jolgorio con la celebración de un Carnaval fenomenal. ¿El motivo? La expropiación petrolera llevada a cabo por el general Lázaro Cárdenas un 18 de marzo de 1938.

Desfiles y bailes populares mueven alegremente los cuerpos de la gente por doquier, al tiempo que hermosas jovencitas destacan ante la mirada embelasada de quienes las convertirán en las Reinas del Petróleo.

Así mismo, la Cámara Nacional de Comercio de Poza Rica auspicia año con año la Feria de Poza Rica, abriendose al público juegos mecánicos, exposiciones ganaderas, bailes y teatro del pueblo durante los meses de marzo, abril y mayo.

Pero la diversión no sólo se encuentra en la Feria y el Carnaval de Poza Rica, si no también en sus restaurantes, bares, centros nocturnos, plazas comerciales, calles, plazas y parques.

La atención que se le brinda nuestros visitantes es la mejor, brindando siempre la calidez de la gente que ha hecho de Poza Rica “la ciudad que lo tiene todo”. ¡Bienvenidos!