Los elementos de un Altar de Muertos
El altar es una parte fundamental de la celebración del Día de Muertos, una de las tradiciones de la cultura popular mexicana y tal vez una de las más conocidas en el mundo que en el año de 2008 fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO bajo la denominación “Las fiestas indígenas dedicadas a los muertos.”
Aunque el Día de Muertos se celebra en diversas partes del mundo, en México, debido a la fusión de las culturas prehispánicas con el mundo occidental, se dio una cosmovisión de fuertes implicaciones estéticas y culturales que han transcendido al acto mismo.
Los elementos de la “Ofrenda o Altar de Muertos”
Se coloca en un lugar prominente de la casa, dependiendo de su tamaño se utiliza una repisa, consola, mesa o inclusive una habitación.
Consta de siete niveles que simbolizan los siete escalones del purgatorio por los que debe de pasar el ánima antes de llegar al cielo.
Representaciones de los cuatro elementos
El viento es representado por un papel delgado de colores llamado “papel de china picado” al cual se le hacen varios cortes para formar figuras como son las calaveras, las calabazas, cruces, flores o palabras.
El fuego es representado por veladoras.
La tierra es representada por frutos, pan y a veces por cenizas.
El agua es representada por el líquido mismo (o mezcal, tequila, pulque o atole) colocado en uno o varios vasos pequeños.
El arco
Se trata de un arco o marco hecho de madera o carrizo de cañas adornado con flores, que se ubica en la cúspide del altar y que simboliza la puerta o entrada al cielo.
Los retratos
Fotografías de los difuntos así como objetos que afeccionaban se colocan en la parte más destacada del altar por ser los celebrados.
Las ánimas del purgatorio
Se pone una imagen o cromo de las benditas ánimas del purgatorio para facilitar la salida del difunto hacia la gloria (entrada al cielo) en caso de que se encontrara en el purgatorio por pecados veniales (sin confesar).
Las cruces
Se acostumbra colocar una cruz pequeña de sal en la base del altar como representación de las almas, o una cruz de ceniza que ayudará al difunto a salir del purgatorio.
El agua
Su papel es de suma importancia ya que permite a los muertos refrescar sus labios después de su viaje del inframundo, asimismo simboliza la pureza de su alma y el amor que por ellos sienta el familiar.
Las flores
La tradicional flor de cempasúchil es uno de los elementos más típicos de los altares de muertos.
Su función no es solamente decorativa puesto que con sus pétalos se delimita el espacio del altar y se hace un camino desde la entrada de la casa hasta el altar para indicar la ruta de los muertos.
Otra flor típica es la de terciopelo.
La luz
Para que las almas puedan encontrar el camino hacia nuestro mundo desde el oscuro inframundo, se ponen veladoras y cirios que cumplen la función de guías de luz.
Las calaveras
Las coloridas calaveras de azúcar representan a los vivos recordando de forma festiva lo irremediable de la muerte.
